Disponible en varios formatos y en varios idiomas, la guía constituye una ayuda fundamental para organizar la propia excursión. Dotados de mapas topográficos, descripciones de los lugares, de los senderos y de los refugios, éstos instrumentos contienen todas las indicaciones útiles en caso de cambios improvisos de programa o en caso de emergencia, suministran informaciones que permiten conocer el ambiente, la cultura y las costumbres de los territorios visitados.
Existen muchos mapas topográficos del área pero sólo algunos de éstos representan el recorrido en su totalidad.
La escala aconsejada es 1:50.000 pero también se pueden usar varios mapas a escala 1.25.000.
Se recomienda usar los mapas topográficos nacionales de España a escala 1:25.000.
1ª Etapa. Hojas 950-II Huéscar y 950-I Castril.
2ª Etapa. Hojas 950-I Castril, 950-II Huéscar y 950-IV Castilléjar.
3ª Etapa. Hoja 950-IV Castilléjar.
4ª Etapa. Hojas 950-IV Castilléjar y 951-III Orce.
5ª Etapa. Hojas 951-III Orce, 951-I Casas de Don Juan, 930-III Lóbrega y 930 –I Puebla de Don Fadrique.
6ª Etapa. Hojas 930 –I Puebla de Don Fadrique, 930-III Lóbrega, 951-I Casas de Don Juan y 950-II Huéscar.
El instrumento de orientación más antiguo es aún uno de los más fiables. Si se usa correctamente junto con el plano topográfico, la brújula permite orientarse en caso de mal tiempo, escoger el recorrido, interpretar el territorio, reconocer las distancias, los desniveles, las exposiciones….
Para su uso, es necesario el conocimiento de las nociones más importantes de orientación como una cierta práctica en el campo.
El volumen aconsejado está comprendido entre 40 y 60 litros, espacio suficiente para realizar la travesía de la Gran Senda.
Se aconseja escoger un modelo con divisiones del volumen en dos compartimientos, uno inferior y otro superior, es decir que permita crear dos ambientes separados, muy útiles en caso de lluvia y si se quieren aislar alimentos de las prendas de vestir.
Otros elementos útiles la predisposición para el sistema de hidratación (por ej, Camelback) y el cierre lateral de apertura que permite acceder al volumen principal de la mochila sin quitársela de la espalda.
El calzado es, quizás el elemento más importante de la equipación de un excursionista. Escoger el calzado correcto permite saborear el placer de la excursión, mientras un calzado inadecuado puede arruinar aquello que habría sido una experiencia maravillosa.
Principalmente, escoger modelos específicos para hacer trekking, con suela bien articulada, suela amortiguadora bastante rígida para no sentir todas las asperezas el terreno. El empeine debe ser resistente y reforzado en las zonas de mayor desgaste (principalmente la punta pero también en el talón), permitir un doblado natural y contener el pie sin apretarlo.
La presencia de una membrana interna hidrorrepelente y transpirable (por ej, GoreTex®, DryTex®, WindTex®…) puede ser muy útil principalmente porque, mantiene el pie seco y limita la formación de ampollas y enrojecimientos.
Generalmente se aconseja usar un calzado alto que, sujetando el tobillo, brinde mayor soporte y proteja contra posibles distorsiones; no se excluye el uso de zapatillas de trekking más bajas pero se desaconsejan en ciertas partes del recorrido.
Los zapatos son, quizás el elemento más importante de la dotación de un excursionista. Escoger el calzado correcto permite saborear el placer de la excursión, mientras un calzado inadecuado puede arruinar aquello que habría sido una experiencia maravillosa.
Principalmente, escoger modelos específicos para hacer trekking, con suela bien articulada, suela amortiguadora bastante rígida para no sentir todas las asperezas el terreno. El empeine debe ser resistente y reforzado en las zonas de mayor desgaste (principalmente la punta pero también en el talón), permitir un doblado natural y contener el pie sin apretarlo.
La presencia de una membrana interna hidrorrepelente y transpirante (por ej, GoreTex®, DryTex®, WindTex®…) puede ser muy útil principalmente porque, mantiene el pie seco y limita la formación de ampollas y enrojecimientos.
Generalmente se aconseja usar un calzado alto que, bloqueando el tobillo, brinde mayor soporte y proteja contra posibles distorsiones; no se excluye el uso de zapatos más bajos pero se desaconsejan en caso de nieve.
La elección de la ropa depende del confort y del bienestar del excursionista. Muchas empresas fabrican prendas específicas para el excursionista y las actividades outdoor que garantizan transpiración, ligereza y conservación del calor; vestirse en capas es garantía de comodidad.
Al organizar el material necesario para una excursión es esencial tener lo necesario en caso de emergencias.